Padres de estudiantes del Centro Escolar Caserío Rosario de Cerén, en Sonsonate, denunciaron que el mobiliario de la institución se encuentra en pésimo estado, y que tuvieron que reparar con dinero de su bolsillo los pupitres para que sus hijos reciban sus clases este año.

De acuerdo con varios padres, el centro educativo convocó a una reunión en la que se les solicitó de manera voluntaria la reparación de mesas y sillas para la comodidad de los alumnos. Dijeron que esta situación les ha generado indignación.

"A todos los padres de familia nos han dado un mueble sea silla o mesa para que los reparemos. Se supone que el Ministerio de Educación (MINED) debe cubrir los gastos de mobiliario de las escuelas. Nosotros lo hacemos porque son nuestros hijos quienes ocupan estos muebles, pero es un gasto extra que no deberíamos tener y hay otros padres que posiblemente no tenga para mandar repararlos", comentó un padre de familia que pidió solo ser identificado como Carlos.

Añaden que no es la primera ocasión que solicita ayuda para reparar el mobiliario o infraestructura. Además, señalaron que en ocasiones los docentes con fondos propios adquieren material para mejorar las aulas.

Fuentes del centro educativo confirmaron que adoptaron la medida por la falta de fondos para reparar los pupitres.